Hoy nos toca despedirnos, y aunque las despedidas nunca son fáciles, queremos daros las gracias por todo lo que habéis significado para nuestro colegio. Vuestra dedicación, vuestra paciencia y, sobre todo, vuestro cariño han dejado una huella enorme en nuestros alumnos y en todos nosotros.
Habéis hecho de cada día una oportunidad para aprender, crecer y sonreír.
Gracias por vuestra entrega, por vuestro compromiso y por la alegría con la que habéis llenado estos pasillos.
Os lleváis nuestro respeto, nuestro cariño y la certeza de que aquí siempre tendréis un lugar.
Os deseamos lo mejor en esta nueva etapa; estamos seguros de que seguiréis iluminando allí donde vayáis, tal como lo habéis hecho aquí.